A pesar de ello, se produjeron varias violaciones de los Acuerdos de París, pues, en ciertos territorios en disputa siguieron produciéndose enfrentamientos. Prueba de ello era que, a finales de 1973, las tropas sudvietnamitas había logrado hacerse con aproximadamente el 15% del territorio disputado.
Los acuerdos de París de 1973.
En los días previos de la firma de los acuerdos, Estados Unidos había entregado un amplio arsenal a los sudvietnamitas, pues contaban con un equipamiento militar valorado en unos mil millones de dólares, así como también numerosas instalaciones militares.
Bien es cierto que buena parte del equipamiento militar entregado ya había sido utilizado y acusaba un importante desgaste. Prueba de ello eran los aviones F-5, de los cuales había muy pocos repuestos.
Asimismo, la ayuda económica estadounidense fue reduciéndose progresivamente. Basta observar los datos, pues en 1974 se prometió una ayuda militar a Vietnam del Sur valorada en 1.500 millones de dólares que terminó quedándose en 700 millones de dólares.
Por su parte, una tormenta política azotaba a Estados Unidos. El presidente ya no dispondría de tanto poder, pues quedaba sometido a consultar con el congreso el envío de fuerzas militares al extranjero por un plazo de tiempo superior a los 90 días. A su vez, el presidente Nixon dimitió como consecuencia del escándalo político del caso Watergate.
Nixon abandona la Casa Blanca tras su dimisión y la presidencia de los Estados Unidos queda en manos de Gerald Ford.
El régimen de Vietnam del Sur del presidente Thieu distaba mucho de ser una democracia plena y su respaldo entre la sociedad vietnamita decaía. Los campesinos llevaban décadas soportando la guerra, la corrupción era un mal endémico en Vietnam del Sur y cada vez era mayor la presión fiscal para sufragar el coste de la guerra. El presidente Thieu no había tenido en cuenta el sufrimiento y el descontento de la población.
En el ejército, la moral era baja y el número de desertores iba en aumento, por no hablar de una oficialidad poco competente y también salpicada por la corrupción. Al no contar con el respaldo de Estados Unidos, no había los suficientes recursos económicos para sostener una guerra en la que la potencia de fuego y el poder aéreo eran elementos claves.
Sin el apoyo de Estados Unidos, Vietnam del Sur no podría soportar la embestida de un políticamente motivado Vietnam del Norte. Por otra parte, los asesores militares estadounidenses habían abandonado el país y los mandos del Ejército de la República de Vietnam carecían de una doctrina adecuada para llevar a cabo la guerra. Cuando 1974 tocaba a su fin, las existencias de municiones de los arsenales de Vietnam del Sur representaban el 20% de sus municiones en 1972. Igualmente, la falta de combustible, había obligado a desmantelar la sexta parte de los escuadrones aéreos sudvietnamitas.
Frente al decadente sur, el norte comunista se fortalecía, creando nuevas unidades, reclutando más tropas hasta alcanzar 19 divisiones y mejorando su logística. Esta vez no tendrían que enfrentarse a una superpotencia militar como Estados Unidos.
El Ejército de la República de Vietnam había desplegado cinco divisiones para combatir en las provincias del norte. Sin embargo, dicha política había dejado desguarnecido el sur. Así, el ejército de Vietnam del Norte, se las arreglaba para contener a los sudvietnamitas en el norte mientras se preparaba para una ambiciosa ofensiva cuyo objetivo era Saigón.
De este modo, en enero de 1975, los comunistas atacaron y conquistaron la provincia de Phuoc Loc. Estados Unidos, hastiado de una larga intervención en Vietnam entre 1965 y 1973, apenas respondió. Hanoi sabía que el régimen de Vietnam del Sur era muy vulnerable. Era evidente que el régimen títere de Vietnam del Sur no resistiría durante mucho tiempo.
De este modo, el general Giap, al frente de las fuerzas comunistas, preparó un ataque que debía ponerse en marcha antes de las lluvias monzónicas de mayo. Dicha ofensiva suponía concentrar sus tropas en las Mesetas Centrales para dividir en dos a los sudvietnamitas.
Tres divisiones del ejército de Vietnam del Norte se atacaron para tomar Ban Me Thout, Mientras tanto, la división aerotransportada del ejército sudvietnamita fue enviada para defender Saigón y se evacuaron unidades del norte para evitar que quedaran rodeadas. A su vez, el Ejército de la República de Vietnam recibió la orden de abandonar Pleiku y Kontum para dirigirse a las Mestas centrales y organizar una contraofensiva que permitiese recuperar Ban Me Thout.
Las órdenes resultaban confusas para las tropas sudvietnamitas, el caos se apoderaba no solo del ejército, sino de una asustada población civil que obstaculizaba el paso a través de la Ruta 7, la única vía de comunicación disponible.
La 18ª División logró mantener Xuan Loc hasta el 18 de abril. Sin embargo, a medida que transcurrían los días, se demostraba que la defensa de Vietnam del Sur se estaba tornando imposible. Por su parte, el 21 de abril de 1975, el presidente Thieu presentaba su dimisión y el general Doung Van Minh asumió la presidencia para tratar de llegar a algún tipo de acuerdo con los comunistas.
Evacuación estadounidense de Saigón.
Sin embargo, el sur de Vietnam se derrumbaba política y militarmente y los estadounidenses procedían a evacuar Saigón. Las imágenes de los estadounidenses evacuando a su personal desde la embajada y del tumulto agolpándose en torno al recinto, eran el vivo retrato del caos. El colapso de la República de Vietnam era inevitable y el 30 de abril los carros de combate se internaron en Saigón avanzando desde múltiples direcciones.
Evacuación de Saigón mediante helicópteros en los tejados de las instalaciones de los Estados Unidos.
Tras neutralizar a dos carros de combate M-41 sudvietnamitas, el tanque 843 (un carro T-54) se abrió camino hacia el palacio presidencial. Las vallas se derrumbaron ante la embestida del tanque 843, que proseguía su inexorable avance seguido por más carros T-54.
Ante las miradas de estupefacción y dolor de los soldados sudvietnamitas apareció un carro de combate con una Bandera Nacional de Liberación. Los sudvietnamitas aguardaron para rendirse a la sombra de los árboles del jardín del palacio presidencial.
La larga guerra de Vietnam concluía. El coronel Bui Tin, del Ejército de Vietnam del Norte, se adentró en el palacio presidencial y fue recibido por el general y presidente Dao Van Mihn. Minh se dirigió al coronel Tin diciendo que había esperado toda la mañana para transferirle el poder, a lo cuál replicó el coronel Tin que no se podía dar lo que no se tenía.
El tanque 843 del Ejército de Vietnam del Norte se adentra en el recinto del palacio presidencial.