La ofensiva del Tet de 1968 supuso un tremendo varapalo para las fuerzas norvietnamitas. Estados Unidos y sus aliados del sur habían frustrado la tentativa comunista de provocar una insurrección en todo Vietnam. Los norvietnamitas no tuvieron más remedio que refugiarse en sus posiciones fronterizas.
Pese a que el primer salto en paracaídas desde un avión se llevó a cabo en territorio estadounidense en el año 1911, el empleo de paracaidistas como fuerza de combate tuvo que esperar a la Segunda Guerra Mundial.