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Alan Deere, la historia del piloto que inspiró el personaje de Tom Hardy en Dunkerque

La película Dunkerque ha suscitado mucha controversia entre el público. Más allá de la polémica que ha generado hubo un personaje que me llamó especialmente la atención: Farrier, el piloto de caza británico interpretado por Tom Hardy. Quiero contaros la historia del hombre que inspiró el personaje de Farrier.


Alan Christopher Deere nació en 1917 en Auckland, Nueva Zelanda. Ya en su niñez presenció el aterrizaje de un avión en la playa y quedó entusiasmado cuando el piloto le permitió sentarse en la cabina. Desde ese momento, Deere decidió que quería ser piloto.


Tras una juventud marcada por su éxito en los deportes convenció a su madre para cumplir su sueño y a los 21 años, Deere se alistó en la Royal Air Force. Tras superar las pruebas de selección, pese a un problema de presión arterial alta, fue admitido y enviado a Inglaterra en 1937.


Superó la instrucción y fue nombrado piloto en 1938. Sirvió temporalmente en el escuadrón Nº54 de la Royal Air Force pilotando biplanos Gloster Gladiator. El escuadrón de Deere permaneció en Inglaterra, con la misión de defender Gran Bretaña. La unidad fue equipada con los cazas Supermarine Spitfire, que rápidamente entusiasmaron a Deere.


La derrota de las tropas francesas y británicas en Francia provocó que en mayo de 1940, Deere fuese enviado a combatir a los aviones de la Luftwaffe. Ya el 23 de mayo, Deere reclamó el derribo de dos Bf 109 y al día siguiente logró abatir otros dos Bf 109 y un Bf 110. El 26 de mayo logró derribar dos cazas Bf 109.


Precisamente lo que le ocurrió en Dunkerque queda reflejado a través del personaje de Farrier en la película dirigida por Christopher Nolan. En la película, Farrier, escaso de combustible se arriesga a continuar derribando aviones alemanes para proteger a las tropas que se encuentran en tierra. Su desprendida acción provoca que Farrier, sin combustible se vea forzado a aterrizar en las playas de Dunkerque.


Pues bien, el 28 de mayo de 1940, Deere trataba de dar caza a un Dornier Do 17 cerca de Dunkerque. En plena refriega con el bombardero alemán, el avión de Deere resultó dañado. Con el sistema de refrigeración tocado, Deere se vio obligado a aterrizar. El piloto neocelandés tomó tierra al borde del agua, sin bajar el tren de aterrizaje. La colisión provocó que sufriese heridas en la ceja. Caminó a través de la playa hasta llegar a un café donde le curaron las heridas.


Al llegar a las playas de Dunkerque, Deere, como piloto de caza no fue muy bien recibido por sus compañeros del ejército de tierra. Las tropas terrestres consideraban que la Royal Air Force no estaba haciendo nada por ayudarles. No veían aviones sobre los cielos tratando de detener a los aparatos de la Luftwaffe, sin embargo, eso no era cierto, los escuadrones de la RAF se batieron con sus medios limitados tratando de mantener alejada a la aviación alemana. Prueba de ello es la labor desempeñada por el propio Deere, que llevaba diez días volando sin descanso.


Finalmente, Deere logró subir a un barco y pudo regresar a Inglaterra. Después de luchar en la batalla de Inglaterra y ser nombrado jefe del escuadrón, en 1942, Deere fue enviado a Estados Unidos para impartir una serie de conferencias a los pilotos norteamericanos en las compartió las técnicas de combate aprendidas en su experiencia como piloto de caza. En marzo de 1944 se le encomendó tomar el mando del ala francesa libre, participando en la batalla de Normandía. Una vez el ala de caza fue trasladada a la Europa continental, Deere permaneció como comandante de ala hasta julio de 1945, cuando pasó a ser comandante de la Estación de Biggin Hill.


Su tenacidad le valió ser condecorado con la Orden de Servicios Distinguidos. Sobrevivió a la guerra y por una sobresaliente trayectoria como piloto recibió la Orden del Imperio Británico en 1945.


Después de finalizar la guerra, continuó con su carrera militar en las Fuerzas Aéreas e incluso llegó a participar como asesor en la película bélica “La batalla de Inglaterra”. Tras fallecer en 1995 a la edad de 77 años, sus cenizas fueron esparcidas sobre el río Támesis desde un caza Spitfire.

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