Enmarcado en la novela histórica encontramos un subgénero olvidado, maltratado incluso: la novela bélica. Hoy en día, en nuestras librerías, al acudir a las secciones de ficción histórica encontramos abundantes obras sobre grandes civilizaciones occidentales como Grecia y Roma y un sinfín de novelas ambientadas en la Edad Media. Sin embargo, desde hace mucho tiempo, cada vez que buscaba algún libro de ficción que se inspirase en las batallas de la Segunda Guerra Mundial me iba de vacío.